02/03/10

El Jueves de la semana pasada, estabamos, mi vieja y Yo, yendo a tomar un cafe a Antaño y Lucas (el hijo de Paola), me paro para saludar. Obvio que no lo habia reconocido, ya que hacia por lo menos 6 meses que no lo veia y estaba re- cambiado.

Cara de adolescente en cuerpo de hombrecito. Alto (le calculo 1.80), flaco, algun que otro grano, peinado medio revuelto y vestimenta teen pero cheto. Muy Bien !

Me dejo medio mareado e inesatable emocionalmente pero paso. Da mucha bronca, pero asi son las cosas y yo me tuve que correr por mi bienestar. El tiempo dira. Yo hice mas de lo que pude.

Al otro dia, ya Viernes, finalmente fui al Cafe Filosofico. Para variar problemas, como siempre, pero pude asistir.A eso de las 17 hs habia pedido un taxi para las 18 horas, y poder llegar a tiempo y hasta fumarme un pucho y relojear el lugar. Las cosas no salieron tan asi, de mas esta decirlo.

A las 17.30 llego mi vieja, que cuando me vio semi vestido empezo a pregutarme a donde iba. con quien, en que? Me puso loco, le conteste monosilabicamente Y me fui. Harto de dar explicaciones.

El taxi que paso era un 405 medio baqueteado con mucho olor a nafta y super recalentado; lo manejaba un hombre de mediana edad con acento Centro Americano, que se metia en cuanta manifestacion o embotellamiento habia. Lento, muy lento fui llegando al lugar que por fuera no decia nada. Absolutamente nada.

Un caseron viejo, pintado de rojo granate. al cual uno accedia al tocar un timbre. Aparecio un tipo bajo (bah, para mi) con jean y una camisa rayada que coloco una rampa de madera para que yo ingrese y cobro los $30, para la admision de la charla. Salon lleno, unas 90 personas de alrededor de 50 y pico de años, habia empezado hace 10 minutos, asi que me coloque a un costado. En el centro una mujer, sentada en una banqueta alta, hablando con un microfono. Todos escuchaban atentos, algunos pocos murmeraban entre si, hasta que se produjo el unico corte o break. Te, cafe, mate cocido y algunas galletitas. Todos se abarataron a las 3 mesas dispuestas para esos menesteres. Un par de mujeres que me vieron desamparado mirando y esperando que me habrieran paso, para entrar con la silla, me ofrecieron algo para tomar. Obvio que pedi un  cafe. Mas tarde la oradora (Roxana), me ofrecio cooquies. Eran duras, pero era eso o Cerealitas.

Vi que se podia salir, asi que le dije/ pedi que me pusiera la rampa y me fui a prender un pucho,

Veinte minutos despues, entre y se hizo una hora de debate en conjunto y organizado. Hablaron unas 10 personas, algunas con razon y otras cuestiones personales. Yo por ser la primera vez no hable, solo mire...

Trate de ser lo mas dinamico posible, sin dejar ningun detalle librado al azar.